cada cual es cada vez más compleja,
más imperfecta y sin ninguna queja
Mis imperfecciones son mis grandezas.
Se que son, seguro, y son mis certezas;
no intenten ser perfectos -moraleja-,
porque la perfección no se refleja;
no existe: los errores son franquezas.
Tú eres el dueño de tu propio viaje.
Tú eres quien eligues los pasajeros.
Recuerda de disfrutar del paisaje,
y no sean tan solo unos mensajeros.
No olviden: nuestro tesoro es la vida.
y no sean tan solo unos mensajeros.
No olviden: nuestro tesoro es la vida.
Raúl Martínez, 1º Bachillerato
No hay comentarios:
Publicar un comentario